Láminas Bituminosas

El diseño de las láminas bituminosas consta de:

MÁSTICO + ARMADURA + MÁSTICO + ACABADO

El mástico dota a la membrana de las características de espesor, plegabilidad y adherencia. La armadura dota a la lámina de las propiedades mecánicas. El acabado de la lámina condicionará la aplicación de la misma, para cubiertas con protección o autoprotegidas en los casos en los que el acabado de la membrana sea con pizarrilla o aluminio.

El mástico está compuesto de betún modificado con polímeros plastómeros en el caso de las membranas de APP y con polímeros elastómeros en el caso de las membranas de SBS. La calidad del betún depende de la cantidad de polímeros añadidos y del proceso de mezcla.

Las principales características del betún PLASTOMÉRO son:

  • Alto punto de reblandecimiento
  • Excelente comportamiento frente a las altas temperaturas, ideal para aplicación en verano
  • Gran plasticidad
  • Especialmente indicadas en cubiertas con deformaciones lentas
  • Excelente durabilidad y envejecimiento
  • Resistencia a las temperaturas altas y bajas extremas.

Las principales características del betún ELASTÓMERO son:

  • Gran estabilidad en temperaturas bajas extremas, ideal para aplicar en invierno
  • Gran elasticidad y elongación
  • Muy buena resistencia al envejecimiento
  • Excelente adherencia
  • Ideal para cubiertas con movimientos oscilantes, tipo deck.

La armadura es un material incorporado en el mástico para proporcionar a la lámina características mecánicas tales como: resistencia al punzonamiento, estabilidad dimensional, resistencia al desgarro, elongación,…

La armadura puede ser un fieltro de poliéster con gran resistencia mecánica y baja elongación, un fieltro de fibra de vidrio que se caracteriza por su estabilidad dimensiona o un film de polietileno.

Los fabricantes de este tipo de láminas, proponen una amplia gama de membranas impermeabilizantes de APP y de SBS. Membranas diseñadas para cumplir las exigencias de las diferentes situaciones de obra y métodos de aplicación: soldables a fuego, flotantes, fijación mecánica y autoadhesivas.

Los sistemas de impermeabilización con láminas bituminosas pueden ser:

            Según el tipo de membrana:

  • Monocapa: más rápido y sencillo de aplicar pero más expuesto a sufrir daños mecánicos debido al menor espesor de la solución. Solo se recomienda cuando la membrana queda con fácil acceso.
  • Bicapa: más lento y complejo de realizar, pero asegura mejor la estanqueidad al llevar dobles solapes. Se recomienda esta solución cuando la membrana va totalmente adherida, ya que la primera lámina puede quedar castigada, cuando el soporte es muy rugoso, etc.

Según la relación con el soporte:

  • Adherida: la impermeabilización se adhiere al soporte en todo su superficie. Proporciona más seguridad a las estanqueidad al hacerse solidaria con el soporte base, y facilita la localización de filtraciones en caso de fallos de la membrana, pero exige capacidad de absorción de los posibles movimientos de la cubierta por los que se debe aplicar en soportes muy estables. Se recomienda en los siguientes casos:
    • En soportes monolíticos y de fácil acceso a la membrana
    • En todos los untos singulares: desagües, perímetro y juntas de dilatación.
    • Cuando la pendiente es superior al 5%.
    • En todas las membranas sin protección pesada.
  • No adherida: la impermeabilización se coloca sobre el soporte sin adherirse al mismo salvo en elementos singulares tales como juntas, desagües, petos, perímetros, etc. Funciona libremente en los movimientos de dilatación-contracción del soporte y en total independencia, de manera que está sometida a menos solicitaciones. Por el contrario, ante cualquier fallo en la impermeabilización, dificulta la localización de las filtraciones.
  • Fijación mecánica: la impermeabilización se sujeta al elemento que sirve de soporte mediante fijaciones mecánicas.

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